DEFINICIÓN
La infertilidad se define como la incapacidad de lograr el embarazo después de tener relaciones sexuales regularmente (más de 3 ocasiones por semana), sin el uso de métodos anticonceptivos, durante un año.
Existen 2 tipos:
La Infertilidad Primaria: clasificamos en este tipo de infertilidad a aquellas mujeres que nunca han conseguido finalizar un embarazo con un recién nacido vivo.
La Infertilidad Secundaria: se atribuye a aquellas mujeres que, tras un embarazo y parto normal, no consiguen llevar a término un nuevo embarazo.
EPIDEMIOLOGÍA
► 8 a 10% de la parejas en el mundo experimentan alguna forma de infertilidad (alrededor de 50-80 millones de personas).
► 1 de cada 5 parejas aproximadamente, tienen algún problema para lograr el embarazo.
► En México, la infertilidad afecta al 15-20 por ciento de las parejas en edad reproductiva y afecta por igual a hombres y mujeres. El origen de la infertilidad es femenino en el 40 por ciento de los casos, masculino en otro 40 por ciento, y por causas mixtas o inexplicables el 20 por ciento restante.
FACTORES DE RIESGO
► La edad en mujeres: La fertilidad de las mujeres disminuye gradualmente con la edad, especialmente cerca de los 35 años, y disminuye rápidamente después de los 37 años. La infertilidad en las mujeres mayores probablemente se deba a una menor cantidad y calidad de óvulos, y también puede deberse a problemas de salud que afectan la fertilidad.
► La edad en hombres: Mayores de 40 años pueden ser menos fértiles que en los hombres jóvenes.
► Consumo de tabaco crónico: Si alguno de los miembros de la pareja fuma «tabaco» o «marihuana«, se puede reducir la probabilidad de embarazo. Fumar reduce la eficacia de un tratamiento de fertilidad. Los abortos espontáneos son más frecuentes en las mujeres que fuman. En los hombres, aumenta el riesgo de disfunción eréctil y de un recuento bajo de espermatozoides.
► Consumo de alcohol excesivo: En las mujeres, no hay un nivel seguro de consumo de alcohol durante la concepción o el embarazo. El consumo de alcohol puede contribuir a la infertilidad. En los hombres, el consumo excesivo de alcohol puede disminuir el recuento y la motilidad de los espermatozoides.
► Tener sobrepeso: Un estilo de vida inactivo y con sobrepeso pueden aumentar el riesgo de infertilidad. En los hombres, el recuento de espermatozoides también puede verse afectado por el sobrepeso.
► Tener bajo peso: Las mujeres pueden sufrir problemas de fertilidad en aquellas que presentan trastornos alimenticios, como «anorexia» o «bulimia» o que siguen una dieta restrictiva o muy baja en calorías.
► Problemas con el ejercicio: La falta de ejercicio contribuye a la obesidad, lo cual aumenta el riesgo de infertilidad. Por el contrario y con menos frecuencia, los problemas de ovulación pueden estar relacionados con el ejercicio intenso y enérgico frecuente en mujeres que no tienen sobrepeso.
INDICACIONES
Las principales indicaciones para iniciar la evaluación de la pareja infértil son:
EN ELLA
► No haber logrado el embarazo después de un año de relaciones sexuales frecuentes y sin protección anticonceptiva.
► Edad de la mujer mayor de 35 años.
► Trastornos tiroideos.
► Menstruaciones irregulares o no predecibles.
► Conocimiento o sospecha de Enfermedad Uterina (útero) o Tubárica (trompas uterinas).
► Tener periodos menstruales muy dolorosos / Ser portadora de Endometriosis.
► Antecedente de haber cursado con «Enfermedad Pélvica Inflamatoria».
► Historial de Cirugías pélvicas en la mujer.
► Si la pareja cuestiona su potencial fértil.
► Múltiples abortos espontáneos.
► Si presentó o fue sometida a un tratamiento para el cáncer, entre otros.
EN EL
► Si presenta en el semen un recuento bajo de espermatozoides u otras alteraciones.
► Antecedentes de problemas testiculares, prostáticos o sexuales.
► Historial de cáncer.
► Presentar testículos pequeños, dolor o hinchazón en el escroto.
► Impotencia sexual.
► Cirugías testiculares o inguinales.
► Si la pareja cuestiona su potencial fértil.
DIAGNÓSTICO
La evaluación inicial de la pareja infértil debe incluir una «historia clínica completa» que indique el tiempo de evolución de la infertilidad, «antecedentes heredofamiliares«, «antecedentes patológicos/no patológicos«, así como la evaluación de estudios y tratamientos que se hayan realizado en el pasado.
Se llega al diagnóstico a través de una evaluación integral de la pareja:
EN ELLA
► A través de un examen físico minucioso, sobre todo de la cavidad pélvica, mamas, tiroides y genitales externos, etc.
► Exploración cervical (cuello uterino), tacto pélvico bimanual y ultrasonido pélvico transvaginal.
► Se debe realizarse un estudio llamado «histerosalpingografía» al terminar la menstruación para evaluar la cavidad uterina, cuello uterino así como la permeabilidad y las características de las trompas uterinas.
► Se recomienda la determinación en sangre de hormonas: «FSH«, «LH«, «Progesterona«, «Estradiol«, «TSH«, «Hormona Antimülleriana» y «Prolactina» para conocer el estado funcional de la paciente, en casos que se sospeche de «Baja Reserva Ovárica» o alguna otra enfermedad específica de acuerdo con los datos obtenidos en la historia clínica y la exploración física.
► Estudios en búsqueda de alteraciones infecciosas, inmunológicas y hematológicas.
EN EL
► Se debe realizar un examen físico meticuloso, exploración de genitales externos, tiroides, próstata, etc.
► Es necesario un estudio de «espermatobioscopia directa» con 2 a 7 días de abstinencia, para determinar la calidad del semen y determinar el potencial reproductivo del paciente.
► Estudios en sangre para la búsqueda de enfermedades infecciosas, inmunológicas y hematológicas.
TRATAMIENTO
Va a depender de la causa o causas de la infertilidad de la pareja, por ejemplo:
► Manejo individualizado en pacientes portadoras de trastornos tiroideos.
► Evitar el consumo de alcohol, tabaco o uso de drogas.
► Mantenerse en un peso ideal.
► Si presenta enfermedades inmunológicas o hematológicas, verificar que estén bien controladas.
► Es recomendable corregir los defectos estructurales encontrados en la pareja, en caso que se presenten y que estén dificultando el embarazo.
Generalmente, los tratamientos para la infertilidad incluyen:
► Tratamientos Farmacológicos.
► Tratamiento Quirúrgico enfocado a corregir las alteraciones anatómicas encontradas.
► Técnicas de Reproducción Asistida como: Inseminación Artificial o Fecundación in vitro (FIV).
PRONÓSTICO
► Generalmente es bueno, siempre que se diagnostique y se de manejo de forma oportuna.
CONCLUSIONES
► Si pasados los tiempos considerados normales no se logra el embarazo, o alguno de los dos presenta factores de riesgo, se recomienda acudir al Médico Especialista en Reproducción Asistida.
► El Especialista evaluará la situación de la pareja y realizará los estudios necesarios para determinar la causa de infertilidad.
► Si se encuentra alguna anormalidad y esta es susceptible de tratamiento médico o quirúrgico convencional, será prioritario corregirla de forma inmediata.
► En afecciones más severas que requieran manejo especializado, se recomienda que sean manejadas por el Médico Especialista en Reproducción Asistida, quien llevará a cabo el mejor tratamiento integral de la pareja.
► La eficacia del manejo va a depender de una detección temprana, un tratamiento adecuado, así como de un buen seguimiento por el especialista.