Se determina mediante:
– Estudios hormonales: Hormona Folículo Estimulante (FSH), Estradiol y Hormona Antimülleriana (AMH).
Consideramos a la Hormona Folículo Estimulante como un marcador clásico. Niveles altos de esta hormona estarán indicando una baja reserva folicular ovárica y como consecuencia una pobre respuesta a la estimulación ovárica. El estudio de la FSH debe ser realizado en los primeros días de menstruación para no presentar variaciones entre cada ciclo menstrual.
Es importante recordar la necesidad de determinar también el estudio de hormona Estradiol al mismo tiempo de la determinación de FSH, ya que valores normales de FSH con niveles de Estradiol superiores a 80 mg/ml podrían indicar baja reserva ovárica.
La Hormona Antimülleriana es una sustancia que se produce en los folículos ováricos. Su determinación en sangre constituye un método novedoso para medir la reserva ovárica. El nivel de la AMH varía con la etapa reproductiva de la paciente, presentando una disminución de este al aumentar la edad. La AMH es un predictor excelente de baja reserva ovárica.
– Estudios ultrasonográficos: Recuento de folículos en el ovario.
El número de folículos en los ovarios se correlaciona con la edad y con la adecuada o no reserva ovárica. Un bajo número de estos folículos encontrados por ultrasonido, está asociado con una pobre respuesta a la estimulación ovárica en ciclos de Fertilización In Vitro.
El recuento de folículos en el ovario en una ecografía transvaginal debe realizarse preferentemente en los primeros días de regla (2-5 día del ciclo).