DEFINICIÓN
Es una complicación del embarazo en la que el óvulo fertilizado (por el espermatozoide) se implanta y se desarrolla fuera del útero (matriz), ya sea en la trompa de Falopio (lo más frecuente), en el ovario, en el cuello uterino o en algún otro sitio de la cavidad pélvica o abdominal.
EPIDEMIOLOGÍA
Varios estudios reportan que el 1,6 por ciento de los embarazos son ectópico, y de éstos el 98 por ciento se producen en las trompas de Falopio. La incidencia ha aumentado en las últimas décadas hasta alcanzar el 1-2%.
Un embarazo ectópico constituye un riesgo para la vida, por lo que debe ser interrumpido lo antes posible. Según algunas estadísticas, 1 de cada 826 mujeres con embarazos ectópicos muere por complicaciones al año. En México se estima que el embarazo ectópico constituye aproximadamente el 2.3 por ciento del número total de embarazos.
LOCALIZACIÓN
El lugar de implantación más frecuente es la trompa uterina (95-98%).
Otras localizaciones más raras son:
► La zona cornual del útero (3%).
► El abdomen (1,4%).
► El ovario (0,5%).
► El cuello uterino (0,1%).
► Otros sitios (0,1%).
FACTORES DE RIESGO
En la mayoría de los embarazos, el óvulo fecundado (por el espermatozoide) viaja a través de las trompas de Falopio hacia la matriz (útero). Si el movimiento de este óvulo a través de las trompas se bloquea o se retrasa, puede llevar a que se presente un embarazo ectópico. Los factores que pueden causar este problema incluyen:
► Edad mayor a 35 años.
► Inicio de vida sexual a temprana edad.
► Uso de dispositivo intrauterino (DIU).
► Defectos congénitos en las trompas de Falopio.
► Presentar Endometriosis.
► Haber tenido un embarazo ectópico con anterioridad.
► Cirugías uterinas previas.
► Haberse sometido a una salpingoclasia o tener el antecedente de una cirugía para revertir la ligadura de trompas.
► Haber tenido múltiples compañeros sexuales.
► Historial de Infecciones de transmisión sexual (ITS).
► Tabaquismo Crónico.
DIAGNÓSTICO
Se llega al diagnóstico a través de:
► Un examen físico (pélvico) para determinar la sensibilidad en el área abdomino-genital.
► Es importante realizar el estudio en sangre de «gonadotropina coriónica humana» (GCH) la cual es una hormona que normalmente se produce durante el embarazo. Con el seguimiento del nivel de esta hormona en sangre podemos sospechar la presencia de embarazo ectópico.
► Se realiza un «ultrasonido vaginal» en donde:
– Si no se ve la bolsa de la gestación en el interior del útero, habrá que realizar una revisión exhaustiva para determinar el sitio de implantación.
– Se busca datos de hemorragia interna.
TRATAMIENTO
El tratamiento del embarazo tubárico puede ser médico o quirúrgico.
El «tratamiento médico» consiste en administrar medicamentos especiales para detener el desarrollo de la gestación y principalmente está recomendado cuando:
► Existe estabilidad hemodinámica de la paciente.
► En embarazo ectópico tubárico no roto o sin datos de sangrado activo intra-abdominal
► Pacientes con niveles bajos en sangre de la hormona HCG (menores de 2000 mUI/ml).
► Tamaño del saco gestacional menor a 3.5 cms.
► Ausencia de latido cardiaco embrionario.
El «tratamiento quirúrgico» se realiza por medio de una cirugía abdominal llamada «Laparotomia o Laparoscopía» y cuyo principal objetivo es buscar el sitio de implantación y removerlo. Las principales indicaciones para este tratamiento son:
► Pacientes que no tienen criterios para tratamiento médico.
► Fallo en el tratamiento médico.
► Embarazo intrauterino viable.
► Pacientes hemodinámicamente inestables.
CONCLUSIONES
► Una de cada tres mujeres que ha tenido un embarazo ectópico puede tener un bebé en el futuro, pero lo más probable es que se presente otro embarazo ectópico. Algunas mujeres pueden no volver a quedar embarazadas de nuevo, a menos que opten por un tratamiento de Reproducción Asistida.
► La probabilidad de un embarazo exitoso después de un embarazo ectópico dependerá principalmente de:
– La edad de la mujer.
– Si ya ha tenido hijos.
– La razón por la cual se presentó el primer embarazo ectópico.
► La «ultrasonografía transvaginal» debe ser considerada en todas las pacientes con sospecha de embarazo tubárico con el fin de visualizar un embarazo intrauterino o extrauterino. La determinación seriada de los niveles en sangre de HCG y ultrasonido pélvico transvaginal son de utilidad en el diagnóstico de embarazo tubárico.
► La eficacia del manejo va a depender de una detección temprana, un tratamiento adecuado, así como de un buen seguimiento por el especialista.
Autor
Biólogo de la Reproducción Ginecología y Obstetricia